Juan Barceló Artiguez fue un visionario del desarrollo industrial de Hato Mayor

Juan Barceló Artiguez

MANUEL A. VEGA

Manuelvega45@hotamil.com

HATO MAYOR. Don Juan Barceló Artiguez, natural de Mallorca, España, fue para Hato Mayor una de las más excelsas figuras de la filantropía criolla y siempre buscó que esta ciudad estuviera a la altura de otras que habían experimentado más desarrollo económico y urbano.

Su caridad era manifiesta y tuvo su mayor evidencia al convertirse en pionero en la producción agrícola y ganadera de la región Este.

Aunque era un emigrante español, su amor al trabajo y al país, hicieron de Don Juan un gran dominicano.

Es por ello que en 1976 recibió la nacionalidad dominicana, pero desde el primer quinquenio de la década del 30 incursionó en la agricultura, la ganadería, la caña de azúcar y otros renglones de la economía nacional.

Se le quería y respetaba en Hato Mayor, por su generosidad y sus consecuentes manifestaciones de bondad.

Ayudaba sin esperar nada a cambio, porque lo tenía todo. Más que generoso, era un hombre valioso.

El asilo de ancianos “Romelia Salas de Barceló”, levantado en el barrio Las Malvinas y donde decenas de ancianos viven higiénicamente y en salud, es la obra de carácter humano más grande dejada por Don Juan Barceló Artiguez a Hato Mayor.

Por sus aportes al desarrollo agrícola, a la ganadería y la agroindustria, el gobierno dominicano lo distinguió, otorgándole las órdenes de Duarte, Sánchez y Mella y la de Cristóbal Colón.

Romelia Salas de Barceló

Fue un preocupado por el desarrollo de Hato Mayor, por ello siempre procuró que la ciudad estuviera dotada de obras que la hicieran competir con otras ciudades que iban delante en el desarrollo.

SUS APORTES ESTÁN AHÍ

Cuando oigamos sonar la sirena del Benemérito Cuerpo de Bomberos Civiles; cuando escuchemos el tin tan de las campanas de la iglesia Las Mercedes, ahí estará Don Juan; cuando recordemos los primeros semáforos de la ciudad, cuando visitemos el parque y veamos la estatua de Mercedes de la Rocha, ahí estará Juan Barceló.

Era oriundo de Mallorca, España y se dedicó a tiempo completo a la producción agrícola y pecuaria, primero en San Pedro de Macorís y luego en Hato Mayor.

Llegó a esta ciudad en el 1937, donde instaló un aserradero con fines comerciales.

Ya aquí se unió en matrimonio con la coterránea Romelia Salas, con quien procreó a sus hijos Ángela,  Mercedes, Margarita, Juanita, Juanito, Iris y Ricardo Barceló Salas.

En 1972 fundó la compañía “Juan Barceló C x A, pero ya en 1945 inicia la importación de ganado de origen Suizo, siendo el primero en mejorar la calidad genética en la región Este.

Para la década de 1950 se convirtió en un gran productor de arroz, teniendo su propio secadero e innovando técnicas en el cultivo del cereal.

Ya para el año 1949 inicia la siembra organizada de cítricos, convirtiéndose más tarde en el primer exportador de frutas de la región Este.

Fue el fundador del Consorcio Citrícola del Este, empresa dedicada a la exportación en gran escala de jugo de naranja concentrado.

Además fue fundador de la “Hacienda Romelia C x A y “Hacienda Guamira”, empresas pioneras en la producción de cacao fermentado y cítrico.

Hay que destacar que las empresas que hoy quedan bajo la dirección de sus hijos Ricardo y Juanita Barceló Salas, son las mayores empleadoras de  manos de obras agrícolas, de técnicos y profesionales de Hato Mayor.