jueves, 22 de julio de 2010

El “Pájaro Carpintero” amenaza para la producción agrícola en región Este



MANUEL A. VEGA
HATO MAYOR.- El tac, tac, tac, sonidos de las picadas del  Pájaro Carpintero, que luego anuncia con un ensordecedor silbato, que está barrenando en la altura de una palma, una mata de cacao o un cocotero, advierte el peligro que representa esta ave en las plantaciones agrícolas, lo que tiene sumamente preocupado a los productores en las cinco provincias del Este del país.
El Carpintero de la Hispaniola es dañino por naturaleza y solo para la producción de cacao representa daños en las plantaciones y gastos para poder ser controlado”, explicó Bernardo Jiménez, asesor técnico del Bloque de Cacao de la región Este, entidad que agrupa a más de 2 mil productores que no encuentran como enfrentar la plaga que representa el ave depredadora.
El pájaro carpintero pertenece a la  “Familia Pícidos” del orden de los Piciformes, de la que se conocen más de 212 especies distribuidas por todo el trópico, es ya la principal amenaza para la producción de coco, palmera, aguacate, cacao, cítrico y otros cultivos, que al que no le chupa la fruta le daña el árbol.
Otras plantaciones a las que ataca es el mango, la caoba, cabirma, capaz y otras maderables que se producen en fincas de vocación comercial de ciudades como Hato Mayor, El Seibo, Monte Plata, La Romana e Higüey.
En el Este no queda una plantación de cacao, que  no presente picadura del ave, que a juicio de productores es un enemigo más fuerte que los roedores.

Además de que dañan el árbol ya se sabes que son expertos en permitir el camino para que plagas y enfermedades ataquen las plantaciones madereras y frutales, aunque hay técnicos que aseguran el carpintero elimina plagas que afectan las bosques y la agricultura.

Entomólogos establecidos en las plantaciones de cítricos y cacao del Este del país, sostienen que el carpintero acorta el ciclo de vida de árbol carcomido, debido a que en las cavidades que hace con su pico, penetra la humedad y se asientan plagas que con el tiempo van matando la planta atacada.

La especie que es endémica de la Hispaniola se encuentra en abundancia en el país, pero los productores de cacao aseguran que la región Este es donde mayor presencia tiene el ave, que definen como destructor de la agricultura.
Los pocos estudios realizados indican que la mayor parte de la dieta de los carpinteros la constituyen frutas silvestres e insectos dañinos a la agricultura y a los bosques, principalmente al cacao y cocoteros.
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Hay que agregar que los huecos que hacen en los árboles para anidar sirven de nido a muchas otras especies como los murciélagos, a ratones, culebras, el perico, la golondrina, la cuyaya, el trogon (Quetzal dominicano), que son usuarios secundarios de cavidades, ya que aunque anidan en huecos, son incapaces de construirlos.

Debido al peligro que representa en la producción de cacao, compañías exportadoras y la Confederación Nacional de Cacaocultores Dominicanos (CONACADO), están financiando perdigones con lo cual se ha implementado una campaña de exterminio de la destructora ave.
El Ministerio de Agricultura, también está sugiriendo a productores en reuniones cazar el ave y vender la lengua a razón de 10 pesos la unidad.
Para ello la cartera agrícola ha ordenado a las sub zonas agrícolas en las  provincias de la región Este convertirse en centro de acopios de la lengua del carpintero, como una forma de garantizar la tranquilidad entre los productores agrícolas, especialmente de cacao.

El carpintero tiene una lengua de una forma muy peculiar, única entre las aves de la Hispaniola, con la cual daña los árboles y frutos agrícolas.
En las décadas del 50, 60, 70 y 60, los campesinos se motivaron tanto en cazar el ave depredadora, que llegaron a creerse que se incentivó la matanza para hacer aguja con la lengua del ave.
“Ahora sabemos que la lengua no es para hacer aguja, sino una política para exterminar el depredador, que está matando el oro del campesino, que es el cacao, el cual tiene precios sobre los 4 mil pesos el quintal”, expuso Jiménez a este medio.

Las cuevas o agujeros, que hacen con su pico de “acero”, le permiten ser un ave libre de la extinción, debido a que su reproducción es alentada por las alturas de los árboles, donde el hombre se le dificulta trepar.
El experto en cítrico y asesor del Consorcio Citrícola del Este, Humberto Puello, aseguró que con exactitud no se ha podido determinar la verdadera magnitud del daño que provoca el depredador a las plantaciones de cítricos, pero aseguró que son cuantiosas.
Explicó que se ha determinado que la  mayor parte de la dieta de los carpinteros la constituyen frutas silvestres, esencialmente la naranja, aguacate, cacao, banano, zapote e insectos dañinos a la agricultura y a los bosques.
Significó que los huecos que hacen en los árboles para anidar sirven de nido a muchas otras especies como los murciélagos, los ratones, culebras, el perico, la golondrina, la cuyaya, el tragón (Quetzal dominicano), que son usuarios secundarios de cavidades, ya que aunque anidan en huecos, son incapaces de construirlos.
En el agrícola municipio de El Valle, provincia de Hato Mayor, el carpintero ha dañado plantaciones completa de cocoteros, significando pérdidas millonarias a los productores de la zona.
Mientras que en comunidades como Vicentillo, El Rancho, La Culebra, El Peñón, El Lial, Mancorneta, Las Agustinas, El Cercado, Viviana y Doña Ana, pertenecientes al distrito municipal San Francisco- Vicentillo, de El Seibo, el carpintero ha hecho estragos en las plantaciones de cacao en las dos últimas cosechas.
Las plantaciones de cacao, además están siendo atacada por las plagas de hormigas y comején, pidiendo los productores se enfrente con urgencia, para evitar ir la quiebra a causa de los insectos, que atacan la planta de cacao hasta secarla.